Exposición
Nelma S.
Una noche, soñé con mi papá. En el sueño, me decía: “Sabes alguna parte de la Biblia que trata de calmar un corazón afligido?”. “Papá, le el Salmo 91, ¡es muy bueno!” Tras unos días, tuvimos la noticia de que él había fallecido. Mi papa vivía solo y lo encontraron muerto después de tres días. Murió en el mismo día de mi sueño. El mismo día del cumpleaños de mi hijo.